Los diferentes tipos de CV

 

El CV cronológico inverso

No hay un CV universal, establecido de una vez por todas sea quien sea su destinatario. Para empezar, resultará útil elaborar y guardar un documento tipo, en el cual integrarás toda la información sobre ti: datos personales, estudios, prácticas, experiencia profesional detallada y exhaustiva. Este documento completo te permitirá disponer de todos los elementos necesarios, te servirá de base, pero en ningún caso debes utilizarlo tal cual.

Este tipo de CV es el más utilizado hoy en día. Como su propio nombre indica, presenta en primer lugar la última experiencia profesional en fecha, para ir retrocediendo en el tiempo hasta llegar a la más antigua. En los casos en que se posee una carrera nutrida, este CV tiene la ventaja de la legibilidad y la pertinencia, sobre todo si el último puesto ocupado guarda relación directa con el perfil del empleo contemplado.

El CV cronológico

Al contrario que el CV cronológico inverso, este tipo de CV presenta las experiencias profesionales desde la más antigua hasta la más reciente. Está más indicado en caso de recorrido profesional poco prolongado, y puede tener la ventaja de poner de manifiesto una coherencia y una evolución en una carrera principiante (promoción, cambio de puesto dentro de una misma empresa, etc.)

El CV funcional (o temático)

Este tipo de CV clasifica las experiencias profesionales según las funciones desempeñadas en ciertos tipos de sectores (comercial, administrativo, producción, etc.). Por tanto, se trata de presentar estas funciones en orden de importancia respecto al puesto solicitado, enumerando en cada caso las experiencias correspondientes a cada una de ellas.